8 Señales que muestran que ya es hora de dejar de conducir
|La pérdida de facultades al volante se vincula a la llegada de la vejez. Un adulto mayor disminuye su capacidad de reacción, no ve con tanta claridad o padece enfermedades que causan la reducción de las habilidades y avisan que es hora de dejar de conducir.
1. Te pierdes realizando trayectos conocidos
Ojo, un despiste al volante lo tiene cualquiera, y puede venir dado por una pérdida de atención mientras hablamos con nuestro acompañante o porque sufrimos alguna enfermedad que la reduce, como la dislexia (que afecta hasta al 15% de la población). Pero si estas pérdidas se vuelven comunes, ojo, porque pueden ser síntoma de un deterioro cognitivo aún no diagnosticado.
3. Cada vez tienen más sustos, roces, pequeños golpes…
Este tipo de incidentes implica una pérdida de atención, de reflejos o de capacidad de atención y concentración al volante.
4. Los peatones, los ciclistas u otros coches salen “de repente”
Ojo, porque puede suponer una pérdida de reflejos general. Además, si tienes incidentes con peatones en los pasos de cebra podría implicar una pérdida de visión lateral: si son frecuentes, acude al oftalmólogo.
5. Problemas de visión nocturna
4 de cada 10 conductores españoles no se siente cómodo conduciendo de noche; y es que la visibilidad, lógicamente, no es la misma que durante el día. Pero si de repente notas una caída en tu visión o problemas serios (falta de adaptabilidad a cambios de luz, mayor sensibilidad a luces y faros, brillos en la retina…), acude al oftalmólogo y considera dejar de conducir de noche.
6. Patologías diagnosticadas
Artritis, alzhéimer, demencia, enfermedad de Parkinson y diabetes tratada con insulina destacan entre las afecciones médicas que dificultan manejar un vehículo. Tales padecimientos perjudican la coordinación, la audición, los reflejos, la capacidad de movimiento, la orientación e incluso el juicio.
7. Los acompañantes sienten miedo
Si tus parientes o amigos no se sienten cómodos como pasajeros, tómalo como una señal para revisar qué pasa con tu manera de manejar. Si alguien siente inseguridad con una persona de la tercera edad al volante, posiblemente notó fallas que el conductor ignoró.
8. Trastornos de la visión
El deterioro de la vista impide la atención a las señales de tráfico, afecta el cálculo de la distancia entre autos y también deriva en inobservancia del peatón. Los conductores de tercera edad necesitan un chequeo anual con el oftalmólogo.